Fe y CorajeLa fe y el coraje andan juntos. No hay fe sin coraje así como no hay coraje sin fe. Una depende de la otra para que haya conquistas.En tres oportunidades Dios le ordenó a Josué que fuera fuerte y valiente. La fuerza aquí no se trataba de vigor físico, sino de fuerza espiritual que tiene que ver con la convicción personal.Todo en la vida depende de la fe y el coraje. Fe para creer en uno mismo y, sobre todo en Dios, y coraje para poner esa fe en práctica.La fe tiene que ser enfocada en la sociedad de la persona con Dios. Fe en sí mismo...